La Biblia nos enseña mucho sobre la importancia del relacionamiento tanto con Dios como con los demás.
A través de las Escrituras, vemos ejemplos claros de cómo nuestras relaciones son una parte crucial
de nuestra vida espiritual.
Éxodo 33:10-11
“Y veía todo el pueblo la columna de nube que estaba a la puerta del tabernáculo; y todo el pueblo se
levantaba, y adoraba, cada uno a la puerta de su tienda. Y hablaba Jehová a Moisés cara a cara, como
habla cualquiera a su compañero. Y él volvía al campamento; pero el joven Josué, hijo de Nun, su servidor,
nunca se apartaba de en medio del tabernáculo.”
Lucas 19:1
“Habiendo entrado Jesús en Jericó, iba pasando por la ciudad.”