Sermon'e

en June 26, 2024 — por .
Este contenido es parte de una serie Fuertes en la Palabra, in temas Confiar en Dios y creer en Dios, Dios es Amor, El favor no merecido & libros 1 Samuel, Efesios.

La mayor victoria de David

Queridos hermanos y hermanas, hoy nos reunimos para reflexionar sobre uno de los relatos más inspiradores de la Biblia, una historia que nos muestra cómo Dios puede usar a lo más insignificante para lograr lo imposible. Nuestro tema hoy es “La Mayor Victoria de David”, y exploraremos juntos las lecciones de fe, valentía y obediencia a Dios que nos enseñan estos pasajes. Versículo Principal: 1 Samuel 17:48-50: 48 “Y aconteció que cuando el filisteo se levantó y echó a andar para ir al encuentro de David, David se dio prisa y corrió hacia la línea de batalla contra el filisteo. 49 Y metiendo David su mano en la bolsa, tomó de allí una piedra, y la tiró con la honda, e hirió al filisteo en la frente; y la piedra quedó clavada en la frente, y cayó sobre su rostro en tierra. 50 Así venció David al filisteo con honda y piedra; e hirió al filisteo y lo mató, sin tener David espada en su mano.”   El joven David, un pastor de ovejas, se enfrenta a Goliat, un gigante y guerrero experimentado. David no tenía la armadura ni las armas que normalmente se esperarían en un combate. Pero, ¿qué tenía David? Tenía fe en el Dios vivo. David sabía que la victoria no dependía de las armas humanas, sino del poder de Dios. En nuestras vidas, nos enfrentamos a gigantes de diferentes formas: problemas financieros, enfermedades, desafíos laborales. Como David, debemos recordar que nuestra fuerza no proviene de nosotros mismos, sino de Dios. Él es quien pelea nuestras batallas y nos da la victoria. La Misericordia de David 1 Samuel 24:1-6: 1 “Cuando Saúl volvió de perseguir a los filisteos, le dieron aviso, diciendo: He aquí, David está en el desierto de Engadi. 2 Y tomando Saúl tres mil hombres escogidos de todo Israel, fue en busca de David y de sus hombres por las cumbres de los peñascos de las cabras monteses. 3 Y cuando llegó a un redil de ovejas en el camino, donde había una cueva, entró Saúl en ella para cubrir sus pies; y David y sus hombres estaban sentados en los rincones de la cueva. 4 Entonces los hombres de David le dijeron: He aquí el día de que te dijo Jehová: He aquí que entrego a tu enemigo en tu mano, y harás con él como te pareciere. Y se levantó David, y calladamente cortó la orilla del manto de Saúl. 5 Después de esto se turbó el corazón de David, porque había cortado la orilla del manto de Saúl. 6 Y dijo a sus hombres: Jehová me guarde de hacer tal cosa contra mi señor, el ungido de Jehová, que yo extienda mi mano contra él; porque es el ungido de Jehová.” Tercera Parte: La Fortaleza en el Amor de Cristo Efesios 3:14-19: 14 “Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre de nuestro Señor Jesucristo, 15 de quien toma nombre toda familia en los cielos y en la tierra, 16 para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu; 17 para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor, 18 seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, 19 y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios.” David mostró no solo valentía y fe, sino también misericordia y respeto por la autoridad de Dios al no matar a Saúl cuando tuvo la oportunidad. En nuestras vidas, la mayor victoria no siempre es sobre nuestros enemigos externos, sino sobre nuestras propias tendencias hacia la venganza y el odio. A través del poder del Espíritu Santo y la comprensión del amor de Cristo, podemos encontrar la fortaleza para amar a nuestros enemigos, perdonar a los que nos han herido, y buscar la paz en nuestras relaciones. Esta es la verdadera victoria que Dios desea para nosotros. Queridos hermanos y hermanas, al igual que David, estamos llamados a vivir en fe, confiar en el poder de Dios y mostrar misericordia y amor en nuestras vidas. Que la historia de David nos inspire a enfrentar nuestros propios gigantes con la certeza de que, con Dios, todas las cosas son posibles Amén.  

en May 26, 2024 — por .
Este contenido es parte de una serie Celebrando la gracia, Días especiales, Especial, in tema La voluntad de Dios & libros 1 Samuel, Hechos de los apóstoles.

Un corazón conforme al de Dios

1 Samuel 15:28: “Entonces Samuel le dijo: Jehová ha rasgado hoy de ti el reino de Israel, y lo ha dado a un prójimo tuyo mejor que tú.” Hechos 13:22: “Y quitado éste, les levantó por rey a David, de quien dio también testimonio diciendo: He hallado a David hijo de Isaí, varón conforme a mi corazón, quien hará todo lo que yo quiero.” En la Biblia, encontramos numerosas referencias a personas que fueron elegidas por Dios para cumplir propósitos específicos. Entre ellas, David destaca como un hombre conforme al corazón de Dios. Analizaremos qué significa tener un corazón conforme al de Dios y cómo podemos aplicarlo en nuestras vidas. En 1 Samuel 15:28, vemos la consecuencia de la desobediencia de Saúl. Dios decide quitarle el reino y dárselo a alguien mejor. En Hechos 13:22, se nos revela que David fue elegido por tener un corazón conforme al de Dios. Esto nos lleva a la primera característica de un corazón conforme al de Dios: la obediencia. David, aunque no fue perfecto, mostró un deseo constante de cumplir la voluntad de Dios. La obediencia a Dios no implica perfección, sino un deseo genuino de seguir sus mandamientos y corregir nuestros errores cuando fallamos. Debemos preguntarnos: ¿Estoy dispuesto a obedecer a Dios en todo momento, incluso cuando es difícil? David fue un rey humilde que reconoció su dependencia de Dios. En múltiples ocasiones, David buscó la guía de Dios antes de tomar decisiones importantes (1 Samuel 23:2, 30:8). Para tener un corazón conforme al de Dios, debemos cultivar la humildad. Reconocer que nuestras fuerzas y habilidades son limitadas y que necesitamos la dirección y el poder de Dios en nuestras vidas. ¿Estoy dispuesto a reconocer mis limitaciones y buscar la guía de Dios en mis decisiones diarias? A pesar de sus grandes logros, David cometió graves errores, incluyendo el pecado con Betsabé y el asesinato de Urías. Sin embargo, su respuesta a su pecado fue crucial. En el Salmo 51, vemos un corazón arrepentido y contrito, pidiendo la misericordia de Dios. El arrepentimiento genuino es clave para tener un corazón conforme al de Dios. No se trata de no fallar nunca, sino de cómo respondemos cuando fallamos. ¿Reconozco mis pecados y busco la restauración a través del arrepentimiento sincero? Un corazón conforme al de Dios no es un corazón perfecto, sino uno que busca obedecer, es humilde y se arrepiente sinceramente. Sigamos el ejemplo de David, permitiendo que Dios moldee nuestro corazón para que podamos cumplir su voluntad en nuestras vidas. Oremos para que Dios nos dé un corazón como el de David, dispuesto a seguirle y servirle en todo momento.

en May 22, 2024 — por .
Este contenido es parte de una serie Fuertes en la Palabra, in temas Dios se acerca, Hacedores de la palabra & libros 1 Corintios, 1 Samuel.

¿Con quién pactas?

Hoy quiero hablarles de un tema crucial en nuestra vida cristiana: ¿con quién pactas? Pactar es más que un acuerdo o un simple compromiso; es una entrega de confianza y lealtad. A menudo, en la vida diaria, hacemos pactos con personas, ideas y comportamientos que pueden moldear nuestra existencia y destino. En 1 Corintios 15:33-34, Pablo nos advierte sobre el impacto de las malas compañías. Él dice: “Las malas compañías corrompen las buenas costumbres”. Piensen en sus vidas. ¿Cuántas veces hemos visto a alguien caer en malos hábitos porque se dejó influenciar por las personas equivocadas? En el trabajo, en la escuela, o incluso en nuestras familias, las personas a nuestro alrededor pueden influir en nuestras decisiones y acciones. La historia de Jabes de Galaad en 1 Samuel 11:1-3 es una poderosa ilustración de los peligros de pactar con el enemigo. Los habitantes de Jabes estaban desesperados. Rodeados por un ejército enemigo, buscaron hacer un pacto para salvar sus vidas, incluso a costa de su dignidad y su visión. Pablo nos insta a “volver a nuestro sano juicio”. Debemos evaluar con cuidado las influencias y pactos en nuestras vidas. ¿Están alineados con los valores que Dios nos enseña? ¿Nos acercan a la santidad o nos arrastran hacia el pecado? Amados, hoy es el día para revisar nuestros pactos. ¿Con quién estamos caminando? ¿Qué estamos permitiendo que moldee nuestro carácter y destino? Volvamos nuestro corazón a Dios, renovemos nuestro compromiso con Él y busquemos su sabiduría en todas nuestras decisiones. Hay que fortalecer nuestra alianza con Dios y alianza significa compromiso y fidelidad con Dios, en lo poco y en lo mucho, debemos pactar con Dios. Que Dios nos guíe para hacer pactos que honren Su nombre y nos lleven a la plenitud de vida que sólo Él puede ofrecer. Amén.

en January 28, 2024 — por .
Este contenido es parte de una serie Celebrando la gracia, in libro 1 Samuel & .

Dios no ve posición ve posicionamiento

Querida congregación, la historia de David y Goliat en 1 Samuel 17 es una lección profunda sobre cómo Dios valora el corazón y el posicionamiento por encima de la posición aparente. Acompáñenme mientras exploramos cómo, a los ojos de Dios, la verdadera grandeza se encuentra en el posicionamiento del corazón. I. El Escenario de la Batalla: Reflexionaremos sobre la escena en la que el gigante Goliat desafía al ejército de Israel. Analizaremos cómo la posición física de Goliat no garantizaba la victoria. II. David, el Joven Pastor: Exploraremos la llegada de David al campamento y cómo era percibido por otros. Inspiraremos a la comunidad a no juzgar por las apariencias externas. III. El Corazón de David: Abordaremos el diálogo entre David y el rey Saúl, donde David revela su corazón de confianza en Dios. Reflexionaremos sobre la importancia del posicionamiento del corazón en la vida cristiana. IV. La Limitación de la Apariencia: Desglosaremos cómo la armadura de Saúl no era adecuada para David, quien confiaba en el Señor. Analizaremos cómo a veces, nuestras propias “armaduras” pueden limitar el obrar de Dios en nuestras vidas. V. La Victoria a Través del Posicionamiento: Conectaremos la historia con la victoria sorprendente de David sobre Goliat. Desafiaremos a la congregación a posicionarse con valentía y fe, confiando en la guía de Dios. Hermanos y hermanas, que recordemos en nuestras propias batallas que Dios no ve simplemente nuestra posición, sino nuestro posicionamiento. Que busquemos alinearnos con el corazón de Dios, confiando en Su guía y valiéndonos de una fe que trasciende las apariencias externas. Que, como David, nos posicionemos para la victoria que viene a través de nuestra confianza en el Señor. Amén.

en February 26, 2023 — por .
Este contenido es parte de una serie Celebrando la gracia, in tema Sigo firme con Dios & libros 1 Samuel, Éxodo.

No será fácil, pero será de provecho

Cuando mas lucha, cuando mayor dificultad tienes, sigue feliz, porque cuando estas más cerca de Dios, las dificultades aparecen, el enemigo más se levanta, por eso cuando Jesús paso todas las dificultades y las vencio, venció al mundo, y ahora se encuentra sentado a la derecha del padre, por eso no debemos caer, y si caemos nos levantamos porque somos vencedores e hijos de Dios, esfuerzate y se valiente. Una vez más libre, no vuelvas más para atras, el egipto debes sacarlo de tu mente, ese desierto donde te sentías cómodo no debes de mirar, Dios te ha sacado de Egipto para no volver más allá, si no de crecer y prosperar en una nueva tierra para fructificar y cumplir tu llamado. Así como Ana y Penina, siempre Penina le sacaba en cara que Ana no tenía hijos, y Ana confío en el señor apesar de su aflicción, confío en Dios y le dio a Samuel y cinco hijos más, por eso nuestro Dios es más poderoso que tus dificultades, tus problema, tu ansiedad. Hermanos, tenemos un gran Dios, por eso debemos poner a Dios más grande que a nuestros problemas.

en January 11, 2023 — por .
Este contenido es parte de una serie Fuertes en la Palabra, in temas Integridad, Recoger la cosecha, Tomar el escudo de la fe & libros 1 Juan, 1 Samuel, Efesios, Lucas.

La fe inquebrantable

Hoy tu fe te hace andar, por la fe vivimos y por la fe somos salvos, por mas circustancias o pruebas que estés pasando, que tu fe no se pierda también tener esto en cuenta. Fortalece tu fe y la de tus hermanos Cuando la fe se pierde o se niega se pierde todo. No dejar de congregarte, de orar y de leer la palabra porque sin estas herramientas vas a perder tu fe El enemigo esta buscando asesinar la fe de los cristianos, debemos superar las pruebas, porque estamos con Dios y con el nos preparamos para recibir la cosecha de lo que hemos sembrado a lo largo de nuestras vidas. Debes perdonar a tu hermano, es así dijo Jesús, deberás perdonarlo 70 veces 7 pues de  hacerlo tu fe se fortalecerá. Nosotros fallamos a cada rato, y Dios nos perdona, así que perdona a tu semejante para obtener una fe inquebrantable. No descuides tu escudo de fe, porque debemos cuidar nuestro corazón, no permitiendo tener un escudo de soberbia, ni de orgullo porque esto no le agrada a Dios. Busquemos agradar a Dios mediante nuestra fe. Si Dios libro a David de Osos, leones, y del gigante Goliat, más nosotros enfrentar la vida con valentía porque Dios nos libra de todas las batallas. Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo y la fe la ha vencido, Dios es nuestra fortaleza y envió a su hijo para darnos la victoria.   Amén.