El Apocalipsis desvelado pt6
La prédica “El Apocalipsis Desvelado” en su parte sexta, expone una visión clara y profunda sobre la soberanía de Cristo y el llamado urgente a la iglesia en los tiempos finales, basándose en pasajes clave de las Escrituras, ahora se habla de la iglesia filadelfia la cual tenia una caracteristica unica de las anteriores iglesias: Jesús es presentado como el que tiene autoridad suprema, simbolizada por la llave de David, capaz de abrir puertas que nadie puede cerrar. Este poder asegura a los creyentes que, si permanecen fieles, serán protegidos y recompensados con una corona eterna. La iglesia debe mantenerse firme en su misión y fidelidad, aun en medio de oposición (Apocalipsis 3:7-13; Isaías 22:22). Isaías describe su visión de la majestad de Dios, enfatizando Su santidad. Esto inspira a los creyentes a reconocer la grandeza de Dios y vivir en obediencia y reverencia, sabiendo que servimos a un Rey justo y santo (Isaías 6:1-3). En los tiempos finales, surgirán falsos profetas y señales engañosas. La iglesia es advertida a mantenerse alerta y aferrada a la verdad de Cristo, evitando ser desviada por milagros falsos o doctrinas erróneas (Mateo 24:24). Jesús es la revelación del Dios verdadero. Los creyentes son llamados a buscar una relación íntima con Él, encontrando en Su verdad la fortaleza y la esperanza necesarias para resistir las pruebas (1 Juan 5:20). Se proclama el dominio eterno de Cristo como el Príncipe de Paz, cuya justicia y autoridad no tienen fin. Este mensaje brinda consuelo a los creyentes, asegurando que el propósito de Dios se cumplirá plenamente (Isaías 9:6-7). Jesús exhorta a sus seguidores a estar vigilantes y orar en todo momento para ser encontrados dignos ante Su presencia en el día final. La oración y la vigilancia son clave para resistir las tentaciones y mantener una fe firme. (Lucas 21:36) La prédica exhorta a la iglesia a permanecer fiel, discernir la verdad, y vivir en santidad y preparación espiritual. Cristo, como soberano y juez justo, es la esperanza segura para todos los que confían en Él. La fidelidad y el compromiso con Dios son indispensables para enfrentar los desafíos de los últimos tiempos y recibir la promesa de vida eterna.