Sermon'e

en April 3, 2024 — por .
Este contenido es parte de una serie Fuertes en la Palabra, in tema Dios es Amor & libro Juan.

El inmensurable amor De Dios

Texto Bíblico: Juan 3:16 (NVI) – “Porque tanto amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.” Hermanos y hermanas, ¿pueden imaginar un amor más grande que el que nos revela este versículo? El amor de Dios es tan profundo, tan vasto, que supera cualquier comprensión humana. Él amó al mundo entero, cada uno de nosotros, de una manera tan inmensurable que dio lo más preciado que tenía: a su Hijo unigénito, Jesucristo. Este acto de amor va más allá de nuestra capacidad de entenderlo completamente. Dios entregó a su Hijo para que cada uno de nosotros, independientemente de nuestros errores y pecados, tengamos la oportunidad de encontrar redención y vida eterna. No hay mayor muestra de amor que esta. En nuestros momentos de debilidad y duda, recordemos este versículo. Recordemos que, a pesar de nuestras imperfecciones, somos amados incondicionalmente por el Creador del universo. No hay distancia demasiado grande, ni pecado demasiado grande que pueda separarnos de este amor. Que este conocimiento del inmesurable amor de Dios nos llene de esperanza, nos fortalezca en nuestras pruebas y nos inspire a amar a los demás de la misma manera. Que seamos embajadores de este amor, compartiendo la buena noticia de la salvación que se encuentra en Jesucristo. En conclusión, reflexionemos en este amor que nos sostiene, nos transforma y nos da vida eterna. Que vivamos cada día recordando que somos amados más allá de toda medida por el Dios que nos creó y nos redimió con su inmenso amor. Amén.

en December 20, 2023 — por .
Este contenido es parte de una serie Fuertes en la Palabra, in tema El amor de Dios al mundo & libro Juan.

Para conocer el plan de Dios, hay que conocerlo primero

Texto Base: Juan 3:16 (NVI) “Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.” Querida congregación, en Juan 3:16 encontramos un versículo que encapsula el plan divino en toda su magnitud. “Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito…” Hoy, exploremos juntos la verdad profunda de que para conocer el plan de Dios, primero debemos conocerlo a Él a través de Su amor. Título: Conociendo el Plan de Dios a Través de Su Amor Texto Base: Juan 3:16 (NVI) “Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.” Introducción: Querida congregación, en Juan 3:16 encontramos un versículo que encapsula el plan divino en toda su magnitud. “Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito…” Hoy, exploremos juntos la verdad profunda de que para conocer el plan de Dios, primero debemos conocerlo a Él a través de Su amor. I. La Dimensión del Amor de Dios: Sumergiremos nuestras mentes y corazones en la magnitud del amor divino que llevó a Dios a enviar a Su Hijo. Reflexionaremos sobre la singularidad y la intensidad de este amor que trasciende nuestra comprensión. II. Conociendo a Dios a Través de Su Hijo: Exploraremos cómo conocer a Jesús es clave para entender el plan redentor de Dios. Analizaremos la vida de Jesús, sus enseñanzas y su sacrificio como revelaciones directas del carácter divino. III. La Puerta de la Vida Eterna: Abordaremos la promesa de vida eterna para aquellos que creen en Jesús. Desglosaremos cómo la fe en Cristo abre la puerta a una relación transformadora y a la promesa de un futuro eterno con Dios. IV. Desafíos para Conocer a Dios: Identificaremos los obstáculos comunes que nos impiden conocer verdaderamente a Dios. Examinaremos cómo superar estos desafíos y profundizar en nuestra relación con Él. V. Vivir en el Propósito de Dios: Conectaremos el conocimiento de Dios a vivir en Su propósito. Desafiaremos a la congregación a buscar activamente conocer a Dios más profundamente a través de la oración, la lectura de la Biblia y la comunión con otros creyentes. Hermanos y hermanas, recordemos que para conocer el plan de Dios, primero debemos conocerlo a Él a través de Su amor manifestado en Jesucristo. Que nuestra búsqueda de conocer a Dios no sea simplemente intelectual, sino una búsqueda apasionada y transformadora que nos lleve a una vida en sintonía con Su plan redentor. “Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna” (Juan 3:16). Que este amor divino sea la brújula que guía nuestra búsqueda constante de conocer a Dios más profundamente. Amén.  

en December 17, 2023 — por .
Este contenido es parte de una serie Celebrando la gracia, in tema Los frutos del espíritu & libro Juan.

El hambre que tienes revela el fruto que darás

Texto Base: Juan 4:1 (NVI) “Cuando Jesús se enteró de que los fariseos habían oído que él hacía y bautizaba más discípulos que Juan…” Hermanos y hermanas, en este pasaje inicial de Juan 4:1, encontramos un punto de partida intrigante para reflexionar sobre nuestras vidas espirituales. Jesús, consciente de las expectativas y críticas de los fariseos, nos enseña que el hambre que tenemos revela el fruto que daremos. Acompáñenme mientras exploramos este principio profundo y desafiante. I. La Confrontación de Jesús: Examinaremos el contexto en el que Jesús se encuentra con la creciente atención y escrutinio de los fariseos. Reflexionaremos sobre cómo enfrentamos las expectativas y críticas en nuestra propia caminata espiritual. II. El Hambre Espiritual: Abordaremos la noción del hambre espiritual, destacando su importancia en el crecimiento y la madurez cristiana. Animaremos a la congregación a evaluar su propio nivel de hambre espiritual y deseo de crecer en la fe. III. La Fuente de Satisfacción: Analizaremos las diferentes fuentes a las que recurrimos para satisfacer nuestro hambre espiritual. Subrayaremos la necesidad de buscar la satisfacción genuina en la presencia y enseñanzas de Jesús. IV. El Fruto de la Saciedad Espiritual: Exploraremos cómo un hambre espiritual genuino produce un fruto abundante en nuestras vidas. Describiremos los atributos de un cristiano cuya hambre es satisfecha por la verdad y el amor de Cristo. V. La Misión y la Multiplicación: Consideraremos cómo la saciedad espiritual nos impulsa a compartir el mensaje de Jesús con otros. Desafiaremos a la congregación a asumir una misión activa y a ser multiplicadores de la fe. Queridos hermanos, recordemos hoy que el hambre que tenemos revela el fruto que daremos. Que nuestro deseo de conocer a Jesús, de sumergirnos en Su Palabra y de ser transformados por Su amor sea evidente en la forma en que vivimos y en el fruto que llevamos. Que nuestra saciedad espiritual no solo sea para nuestro beneficio, sino que se convierta en una fuente de vida para aquellos que nos rodean. “Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados” (Mateo 5:6). Amén.

en December 13, 2023 — por .
Este contenido es parte de una serie Fuertes en la Palabra, in temas Dios es Amor, Dios se acerca & libro Juan.

El Dios que se acerca

Texto Base: Juan 20:11-16 (NVI) “Pero María se quedó afuera llorando junto al sepulcro. Mientras lloraba, se inclinó para mirar dentro del sepulcro, y vio a dos ángeles vestidos de blanco, sentados donde había estado el cuerpo de Jesús, uno a la cabeza y otro a los pies. ‘Mujer, ¿por qué lloras?’, le preguntaron. ‘Porque se han llevado a mi Señor’, respondió ella, ‘y no sé dónde lo han puesto’. Al decir esto, se volvió y vio a Jesús de pie, pero no sabía que era él. ‘Mujer’, le preguntó Jesús, ‘¿por qué lloras? ¿A quién buscas?’. Suponiendo que era el jardinero, ella le dijo: ‘Señor, si tú lo has sacado de aquí, dime dónde lo has puesto y yo iré por él’. Jesús le dijo: ‘¡María!’. Ella se volvió y exclamó: ‘¡Raboni!’ (que significa: ‘¡Maestro!’). ‘No me retengas’, le dijo Jesús. ‘Todavía no he subido al Padre. Ve a decir a mis hermanos: ‘Subo a mi Padre y a su Padre, a mi Dios y a su Dios””. Querida comunidad, ¿han sentido alguna vez que Dios está lejos, inalcanzable en medio de la tristeza y la pérdida? En este pasaje impactante de Juan 20:11-16, descubrimos una verdad transformadora sobre nuestro Señor: Él es el Dios que se acerca. Acompáñenme mientras exploramos juntos esta revelación extraordinaria. I. La Tristeza de María: Reflexionaremos sobre la profunda tristeza de María Magdalena junto al sepulcro vacío. Identificaremos situaciones en nuestras vidas donde hemos sentido la ausencia aparente de Dios. II. La Búsqueda Desesperada: Exploraremos la búsqueda desesperada de María por el cuerpo de Jesús, un reflejo de nuestras propias búsquedas ansiosas. Analizaremos cómo a veces buscamos respuestas y consuelo en lugares equivocados. III. La Revelación Transformadora: Examinaremos el momento revelador cuando Jesús se acerca a María, aunque ella no lo reconoce de inmediato. Consideraremos cómo, en medio de nuestras lágrimas, Jesús también se acerca a nosotros de maneras que a veces no entendemos. IV. El Llamado Personal: Destacaremos la importancia de la relación personal que Jesús busca con cada uno de nosotros. Invitaremos a la congregación a reflexionar sobre su propia relación con el Dios que se acerca. V. El Encargo de Jesús: Finalmente, exploraremos el mensaje que Jesús confía a María y cómo ese mensaje transforma su dolor en esperanza. Desafiaremos a la congregación a llevar el mensaje del Dios que se acerca a aquellos que lo necesitan. Hermanos y hermanas, recordemos hoy que servimos a un Dios que no está lejos en nuestros momentos de dolor y confusión. Jesús es el Dios que se acerca, que conoce nuestras lágrimas y busca transformar nuestras tristezas en alegría. Que podamos experimentar la cercanía de Dios en cada etapa de nuestra vida, sabiendo que Él está siempre presente, listo para revelarse y transformar nuestras lágrimas en adoración. *”No me retengas”, le dijo Jesús. ‘Todavía no he subido al Padre. Ve a decir a mis hermanos: ‘Subo a mi Padre y a su Padre, a mi Dios y a su Dios”” (Juan 20:17). Amén.  

en February 22, 2023 — por .
Este contenido es parte de una serie Fuertes en la Palabra, in tema Por los frutos se conocerán & libro Juan.

La vid y los pampanos

Cuando Dios empieza a trabajar en tu vida, si esta doliendo, dale gracias por que esta creando frutos, y el lo limpia para que de más frutos. El que no lleva fruto el padre lo quitara y sera echado al fuego. Lo más importante es tener frutos, la vid es una figura de Jesús y nosotros somos los pampanos. En la iglesia hay pampanos que llevan frutos y hay pampanos que no llevan frutos ya que el que no lleva el fruto no está conectado a la vid. La vid simboliza a Jesús, pero hay pampanos que afectan a otro pampanos, Como unidad de Cristo debemos atraer a los demás por nuestro testimonio, la religiosidad no permite engendrar algo nuevo, un pampano seco no engendra fruto, por eso debemos dar frutos haciendo otros discípulos. Tenemos que ser creyentes fructiferos, pero debemos morir al viejo hombre y no enseñarle al nuevo discípulo mis cosas, es enseñarle de Cristo, permaneciendo en Cristo Jesús para obtener muchos frutos. Permanecer en Dios y en su palabra todo lo que pides se les dará, y pedir todo lo que quieras. Esta es la condición para que nuestras oraciones sean oidas por el padre: El siempre oye nuestras oraciones, debemos llevar frutos y que el fruto permanezca

en February 19, 2023 — por .
Este contenido es parte de una serie Celebrando la gracia, Especial, in libros 1 Corintios, Juan & .

El beneficio de la libertad😇

Cuando no conozco el beneficio de la libertad, me quedo preso. Un día fuimos niños, hablabamos como niños, pero ahora como adulto debemos cambiar la forma de hablar, tenemos que entender que Dios tiene algo mayor para nosotros. No es difícil vencer al enemigo, lo dificil es dejar de ser presos, de nuestro confort, a medida que se crece hay más responsabilidades, tanto en lo físico y en lo espiritual, a medida de que vivamos la libertad más responsabilidad tenemos que tener, y la santidad es una vida de libertad con responsabilidad. Entonces se alcanza la santidad aquellos que son responsables con Dios y dejan de ser niños, tener libertad con responsabilidad, necesitamos tener una vida con Dios. La gracia de Dios vino para darte libertad, el sacrificio de Jesús principalmente fue para salvarnos y para que tu tuvieras la gracia de Dios, sin ataduras. Santidad debe ser lidiar con la responsabilidad.